Sara Escobar, venció el perfeccionismo
“Aceptamos el amor que creemos merecer”
– de la Película “The Perks of Being a Wallflower”.
Hola, mi nombre es Sara Escobar y mi testimonio es de redención.
Cuando creces en la iglesia, se supone que obviamente has experimentado el poder de Dios y lo conocés completamente, pero en realidad, muchas veces lo que vivimos son solamente un conjunto de prácticas religiosas que se convierten en una fortaleza en que nos refugiamos y que nos impide encontrarnos con Dios.
Así viví por muchos años y luché con el perfeccionismo. (En el perfeccionismo no existe el amor, porque no da espacio a La Gracia de Dios para cubrir ninguna falta. El perfeccionismo es idealista, persigue metas que no son realizables y aún así, aplica el castigo en la forma más cruel en la que quien lo sufre, es quien lo aplica).
Luché por ser la mejor y la primera en todo. Sin importar el cansancio que eso ocasionaba ni la marcada línea que tracé para no vivir en libertad.
Era prisionera de mi religiosidad y de mi falta de conocimiento de un Padre que tanto me buscaba.
Un día, tuve un encuentro con el amor de Dios, recuerdo que estuve así por horas, llorando y dejando que mi corazón sintiera tantas emociones reprimidas. Acepté el perdón irracional de Dios y el sacrificio de amor más grande jamás hecho; la cruz de Jesús.
Ese día, entregué por completo todo lo que creí saber de Dios y Su Gracia. Abrace su redención y la verdad es que Él satisface todo en mi vida, ya no necesito ser perfecta ni la mejor o la primera en todo, porque cuando escuchamos al Creador del universo decirnos quién somos, todo lo demás se vuelve desabrido e inútil.
Te pregunto ahora, ¿A quién estás tratando de impresionar?, ¿Ya sabes lo que el Padre celestial siente cuando te ve?
“Hasta ahora solo había oído de ti, pero ahora te he visto con mis propios ojos.” – Job 42:5 NTV